¿Sabías que tu nariz genera un cuarto de galón de mucosidades por día? Podríamos hacer todo un festival de slime si no fuera por el recelo y asquito que les tenemos. Es importante reconocer el heróico trabajo de la mucosidad y los pelos de la nariz pues, gracias a ellos partículas de polvo, gérmenes, polén, etc. no llegan a nuestros pulmones a causar infecciones y quién sabe qué otras cosas. Pero también es cierto que el moco se forma cuando esas partículas indesables son atrapadas y la mucosidad se seca, y quizá sea la primera razón por la que es mejor no comérselos. En fin, esta nota es sobre todo lo que debes saber si tu hijo se come sus mocos.
¡Los mocos contienen muchos gérmenes!
Sí pero puedes caerte de espaldas … hay estudios que los recomiendan porque son buenos para la salud, como una dosis de anticuerpos directo al estómago para mejorar el sistema inmunológico, por suerte hay controversias al respecto.Pero bueno tampoco vamos a asustarnos, porque como bien apuntaba alguien por ahí, recuerden que en algunos lugares a los chicos, y no en plan ofensivo, se les conoce como “mocosos” porque la infancia es el tiempo en donde estos abundan con todos sus colores y texturas, porque los resfríos están al orden del día.
Resfriados…
La coloración de los mocos no es algo que deba preocuparnos suelen ir cambiando de líquidos transparentes, a blancos espesos, a verdes espesos, a verdes secos…Los resfriados comunes no necesitan de mayores cuidados, se curan solo dentro de una semana, pero si un niño presenta fiebre o tos persistente debe ser llevado al pediatra.
¿A qué saben los mocos?
En fin volvamos a los mocos, le pregunté a un niño de tres años a qué sabían y me dijo a “agua de mar”… salados al gusto, de texturas varias y con la divertida sensación de desprendimiento de la nariz pueden resultar claramente apetecibles, sobre todo cuando un niño no tiene unos pañitos a mano y le hablan por usar las mangas de la ropa.Lo que queremos decir es que incluso para tratar estos casos hay que hacerlo sin demonizarlos ni tacharlo deel gran problema. Es cierto que algunos adultos se quedan con ese horrible hábito de urgarse la nariz y comerse su contenido pero la mayoría habrá comprendido que su educación está sobre ese desagradable hábito.
Consejos y calma
Hay algunos consejos que se dan para ayudar a un niño a que deje de comerse los mocos, pero quizá no es tanto evitar que los tenga, aunque la humidificación, las gotas de agua marina, beber mucho líquido, y evita comprar jarabes sin una recomendación médica…Pero sobre todo ponte a la altura de los ojos de tu hijo y habla con él, dile ” yo sé que saben a agua de mar pero si vamos por la calle y hay mucho humo y te suenas la nariz saldrán unos mocos sucios y a veces la suciedad no se ve a simple vista, no solo son tus mocos, son tus manos que están sucias y luego te enfermas”.El trabajo no es fácil, ¿cómo hacer que deje de comerse los mocos? tendrás que apoyarte en las reglas de educación.Así como no puede hacer otras cosas, no porque sean mortales, sino porque dan la impresión de no ser un bien hábito de limpieza o adecuadas para ciertos espacios o la sociedad tendrás usar todo tu don de mando, cariño y paciencia.Empieza por enseñarle a no meterse los dedos en la nariz de manera brusca que puede lastimarse, porque esa práctica es mucho más común que comerse los mocos y si puedes con esa, ante la cual debes llegar como en todo a un acuerdo como hacerlo en privado con un papel en el baño, ya la otra es más sencilla.{{cta('4184544b-d766-499a-9ebe-20fe8c564869')}}
Escrito por:
Daniela Vega es una mamá emprendedora que ha dejado una marca significativa en el mundo digital. Fundadora de Storybook: Bedtime Stories, la aplicación líder en más de 90 países, ha impactado positivamente a innumerables familias alrededor del mundo. Además de su éxito empresarial, Daniela ha construido una comunidad sólida de más de 12.000 madres en Facebook, donde se apoyan mutuamente y comparten experiencias.
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