12 Actividades para trabajar con niños con TDAH

Sabemos que criar a un niño con TDAH es un viaje lleno de amor, desafíos y, sobre todo, muchas recompensas.

Como padres, queremos que nuestros hijos crezcan felices, seguros de sí mismos y con todas las herramientas necesarias para enfrentar el mundo.

Por eso, aquí te dejamos 11 actividades que no solo los van a divertir, sino que también les ayudarán a desarrollar sus habilidades motoras, cognitivas y sociales. ¡Vamos a ello!

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Todas estas actividades están pensadas para ser entretenidas y educativas, creando un entorno inclusivo donde tu peque pueda florecer.

Además, son perfectas para fomentar la autonomía en niños, ayudándoles a ganar confianza e independencia. ¡Porque sabemos que cada pequeño paso cuenta! 

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1. Leer cuentos juntos

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No hay nada como un buen cuento para capturar la atención de un niño y enseñarles algo valioso al mismo tiempo. Las actividades para niños con sindrome de down  también benefician mucho al desarrollo de los niños con TDAH a través de los cuentos que usan un lenguaje sencillo y repetitivo, y que tienen ilustraciones llamativas. 

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Leer juntos no solo mejora su lenguaje y capacidad de atención, sino que también fortalece el vínculo entre tú y tu peque. Puedes elegir cuentos que reflejen sus intereses o que tengan personajes con los que puedan identificarse.

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2. Juegos de construcción

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Los juegos de construcción son geniales para trabajar la coordinación y la motricidad fina. Juegos como bloques o rompecabezas simples no solo ayudan a desarrollar estas habilidades, sino que también son estupendos para mejorar la concentración y estimular la creatividad. 

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Busca actividades sobre el valor del esfuerzo para niños  como juegos con piezas grandes y coloridas que sean fáciles de manejar, perfectos para los peques que están aprendiendo a coordinar sus movimientos. Además, ¡les encantará construir cosas contigo!

3. Actividades sensoriales

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Las actividades sensoriales son una maravilla para los niños con TDAH. Pueden jugar con arena, agua, arroz, plastilina… ¡lo que más les guste! Estas actividades de perseverancia para niños no solo son divertidas, sino que también ayudan a mejorar su integración sensorial y respuesta a los estímulos. Además, estas actividades para trabajar la paciencia en niños fomentan la independencia, ya que les permiten explorar de manera libre y segura.

4. Arte para expresar emociones

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¡El arte es un medio increíble para que los niños se expresen! Pintar, dibujar o hacer manualidades les permite comunicar sus emociones y pensamientos de forma creativa. Además, estas actividades son estupendas para trabajar la motricidad fina y aumentar la autoestima.

Utiliza materiales seguros como pinturas de dedos, crayones gruesos o plastilina, y deja que se expresen sin miedo a equivocarse. ¡Aquí no hay reglas!

5. Juegos de agua

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A casi todos los niños les encanta jugar con agua, ¡y los peques con TDAH no son la excepción! Los juegos de agua son fantásticos para fortalecer los músculos y mejorar la coordinación motora.

Puedes organizar juegos sencillos como llenar y vaciar recipientes o jugar en una piscina pequeña. 

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Estas actividades son perfectas para el desarrollo físico y, además, son súper divertidas. No necesitas más que un balde grande, algunos juguetes y… ¡a disfrutar del agua!

6. Juegos de imitación

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Los juegos de imitación, como jugar a "la casita" o "el doctor", son excelentes para trabajar la socialización y la empatía en niños. Permiten que los niños practiquen habilidades sociales, comprendan roles y situaciones de la vida cotidiana, y desarrollen su imaginación. Además, actividades para trabajar responsabilidad en niños  ayudan a mejorar el lenguaje y la comunicación, ya que describen sus acciones y las de los demás. Usa juguetes que simulen objetos reales o simplemente deja volar su imaginación.

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7. Ejercicios de motricidad fina

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Trabajar la motricidad fina es crucial para los niños con TDAH. Actividades como ensartar cuentas, recortar con tijeras seguras o moldear arcilla son perfectas para fortalecer los músculos pequeños de las manos y mejorar la coordinación ojo-mano. 

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Puedes usar fichas grandes y cordones para ensartar, haciéndolo más fácil y evitando frustraciones.

Además, estos ejercicios preparan a los niños para tareas más complejas, como escribir o manipular objetos pequeños.

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8. Música y baile

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¡A mover el esqueleto! La música y el baile son actividades que no solo divierten, sino que también ayudan a mejorar la coordinación, el equilibrio y el desarrollo emocional de los niños.

Cantar canciones, tocar instrumentos o bailar al ritmo de la música son formas estupendas de trabajar tanto la motricidad gruesa como la fina.

Además, la música es una herramienta poderosa para expresar emociones.

Puedes usar CDs de música infantil, aplicaciones o simplemente improvisar con instrumentos caseros.

9. Juegos de mesa adaptados

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Los juegos de mesa adaptados son una gran herramienta para trabajar diferentes habilidades cognitivas.

Juegos como el dominó con fichas grandes, el bingo o los juegos de memoria son ideales para mejorar la memoria, la atención y la resolución de problemas.

También promueven la interacción social y la capacidad de seguir reglas, lo cual es fundamental para su inclusión en el colegio y otros entornos sociales.

¿Y por qué no probar también algunos juegos para mejorar la confianza en niños?

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10. Actividades al aire libre

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Salir al aire libre siempre es una buena idea. Actividades como caminar, correr o jugar en un parque son esenciales para el desarrollo físico y emocional.

Estar en contacto con la naturaleza les permite explorar, mejorar su condición física y desarrollar habilidades motoras gruesas. 

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Además, estas actividades ofrecen una gran oportunidad para que los niños practiquen la socialización en un entorno menos estructurado.

También puedes aprovechar para realizar algunas actividades para trabajar el desapego en niños y ayudarles a manejar mejor sus emociones.

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11. Juegos de rol

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Los juegos de rol son increíbles para trabajar la imaginación y la creatividad.

A través de estos juegos, los niños pueden explorar diferentes personajes y situaciones, comprendiendo mejor las emociones y los comportamientos sociales. 

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Además, son una excelente forma de trabajar la confianza, permitiendo que los peques exploren diferentes aspectos de su personalidad en un entorno seguro y controlado.

Puedes usar disfraces, marionetas o simplemente inventar historias juntos.

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¿Cómo estimular a un niño con TDAH?

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Para estimular a un niño con TDAH, es importante reducir las distracciones creando un ambiente tranquilo, fijar límites de tiempo para las actividades, incluir descansos frecuentes, y usar actividades que involucren varios sentidos. Además, ser flexible y adaptar las estrategias a sus necesidades individuales ayudará a mantenerlos enfocados y motivados.

Puedes comenzar con actividades para trabajar el enojo en niños y luego avanzar a ejercicios de motricidad fina y gruesa, ¡todo a su ritmo! 

¿Cómo trabajar la motricidad fina en niños con TDAH?

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Dibujar líneas o círculos, doblar ropa, sostener y escribir con un lápiz, y apilar bloques son excelentes actividades para mejorar la motricidad fina en niños con TDAH.

Cada una de estas tareas ayuda a fortalecer los músculos de las manos, mejorar la coordinación ojo-mano, y desarrollar habilidades motoras necesarias para el día a día. ¡Intenta incorporarlas en su rutina de forma divertida y gradual!

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